Leo Caprile sufrió un accidente cerebrovascular (ACV) el fin de semana pasado. Afortunadamente, su rápido actuar le salvó la vida.
Durante el fin de semana pasado, el animador de televisión nacional, Leo Caprile, sufrió un accidente cerebrovascular (ACV), también conocido como infarto cerebral, lo que de momento lo mantiene en recuperación.
El diagnóstico lo compartió él mismo en su cuenta de Instagram (@leonardocaprile) donde entregó los detalles de la situación, que ocurrió específicamente en la madrugada del sábado 20 de abril.
“La madrugada de este sábado tuve síntomas anormales y sospechosos que me hicieron acudir a un centro hospitalario, donde me atendieron de emergencia”, relató.
Con esto, confirmó que la causa de su malestar era un infarto cerebral. “Afortunadamente la prontitud de la atención evitó daños en mi organismo”, siguió Leo Caprile.
El también conductor radiofónico actualizó que actualmente está en recuperación y agradeció el interés y las muestras de afecto.
¿Cómo identificar un infarto cerebral, lo que le pasó a Leo Caprile?
En primer lugar, los infartos cerebrales también son conocidos como accidente cerebrovascular (AC) isquémico y se produce cuando el suministro de sangre al cerebro se ve interrumpido.
Bupa Salud lo describe de esta manera: “Si tu cerebro no recibe suficiente sangre que le provea el oxígeno y los nutrientes que necesita, las células del cerebro se dañarán o morirán y se produce un ACV isquémico o infarto cerebral isquémico”.
En cuanto a los síntomas, estos pueden variar según el tipo de ACV o la parte del cerebro afectada, generalmente son: debilidad facial, debilidad en el brazo o problemas en el habla, que se presentan en cuestión de segundos o minutos. El portal también reconoce estos otros síntomas frecuentes:
- pérdida repentina de la visión en uno o ambos ojos, o visión borrosa
- confusión o dificultad para entender
- pérdida del equilibrio o la coordinación
- dolor de cabeza intenso
¿Qué consecuencias tiene un infarto cerebral?
Según explica Bupa Salud, algunos ACV pueden ser bastante leves y sus efectos temporales, mientras que otros pueden ser más graves y causar daños permanentes. Las complicaciones más frecuentes son:
- debilidad o parálisis, generalmente en un lado del cuerpo
- falta de sensación de un lado del cuerpo (generalmente el lado izquierdo)
- pérdida de la sensibilidad en un lado del cuerpo
- dificultad para tragar
- cansancio extremo y problemas para dormir
- problemas con el habla, para leer y escribir
- problemas con la visión, por ejemplo, visión doble o ceguera parcial
- dificultades con la memoria y la concentración
- dificultad para controlar su vejiga y evacuaciones (incontinencia), o estreñimiento
- cambios de comportamiento
fuente: T13.cl
